Esta figura no tiene nada de novedoso, pero he querido subirla tras una reflexión.
El espeleólogo nunca fue de mis favoritos y eso que lo  tuve de pequeño ( ni entonces me gustó). De hecho era un muñeco que lo tenía un poco de casualidad, lo iba completando conforme me venían piezas en lotos...incluso me he deshecho de él varias veces.
Pero últimamente  como que le he ido cogiendo el gustillo a base de reunir piezas, sobre todo tras coseguir la fabulosa escala,que bien mirado igual le vale al zapador, que a un oldado y si apretamos le vale has ta a los piratillas....

Bueno que la foto no es de mucha calidad, pero si lo suficiente como para que aquellos enamorados de esta pieza, la disfruten.

Loscharlys, está claro que cada uno tenemos nuestras prefrencias, pero has hecho muy bien en rescatar todo un clásico con genuino sabor madelman; desde luego es un modelo que ha de estar en cualquier colección.

bonito keko.muy bien conservado

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un abrazo es un gran regalo ... se ajusta a todas las tallas y es fácil de cambiar

ostras pues para mi es uno de mis favoritos mira que he jugado con el sobre todo con el rodillo ,pues no lo he metido en agujeros,un saludo

A mí me pasó algo parecido, nunca le tuve aprecio y ahora tengo 2 (fíjate) y me llaman más la atención.........me tiraba más el antitanque, tropa de choque, cosmic........parece que daban más juego ¿NO?........    Enhorabuena por esa pieza que luce radiante   SALU2

A mi me pasó igal... ni fu ni fa... pero ahora ... me parece una figura cojonuda.. de hecho tengo tres vintages... y poco a poco me he hecho con todos los accesorios... o casi todos... me encanta esta serie.. yo le llamaba " el minero"...



Ahhh... impecable tu madelman... Una maravilla...

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http://javivela.wix.com/madelman

Pues fue uno de tantos que tuve y a mi si que me gustava, sobre todo lo del torno, un accesrio muy realista, bonita figura la que enseñas  

Yo guardo un entrañable recuerdo de esta figura de pequeño. Tampoco es de mis favoritas, pero la acnedota de como llego a mis manos es para recordar:

En mi casa la economia no era muy desahogada que digamos, mas bien un poco apretada y humilde, para que engañarnos. El caso es que, no se por que motivo, una mañana de sabado, cuando debía tener entre seis ó siete años, salía con mi Padre de la peluquería, donde me acababan de "apañar" para un par de meses y sin motivo aparente, puesto que no era fiestas ni época de cumpleaños, mi Padre me dijo que ibamos a comprar un madelman, y me preguntó cual quería, y yo, clao, que iba a responde, pues que quería el comando negro, pero a mi Padre no le debío guatar mucho la idea, pues el había sido uno de esos millones de niños que habían sufrido la guerra civil del 36-39 y no le entusiasmo la idea, y a pesar de mi empezinamiento, con mucho cariño y muy buenas palabras me supo convencer de las aventuras que podría disfrutar con el espeleologo, y fue el que me llevé para casa. Este regalo inesperado, debio ser a causa de algún extra cobrado, porqué ya os digo que mi casa era muy humilde.

Por eso guardo ahora de adulto un recuerdo muy grato de ese keko... y ahora perdonarme, que me he emocionado con el recuerdo.

iesutemplar escribió: [Ver mensaje]

Yo guardo un entrañable recuerdo de esta figura de pequeño. Tampoco es de mis favoritas, pero la acnedota de como llego a mis manos es para recordar:

En mi casa la economia no era muy desahogada que digamos, mas bien un poco apretada y humilde, para que engañarnos. El caso es que, no se por que motivo, una mañana de sabado, cuando debía tener entre seis ó siete años, salía con mi Padre de la peluquería, donde me acababan de "apañar" para un par de meses y sin motivo aparente, puesto que no era fiestas ni época de cumpleaños, mi Padre me dijo que ibamos a comprar un madelman, y me preguntó cual quería, y yo, clao, que iba a responde, pues que quería el comando negro, pero a mi Padre no le debío guatar mucho la idea, pues el había sido uno de esos millones de niños que habían sufrido la guerra civil del 36-39 y no le entusiasmo la idea, y a pesar de mi empezinamiento, con mucho cariño y muy buenas palabras me supo convencer de las aventuras que podría disfrutar con el espeleologo, y fue el que me llevé para casa. Este regalo inesperado, debio ser a causa de algún extra cobrado, porqué ya os digo que mi casa era muy humilde.

Por eso guardo ahora de adulto un recuerdo muy grato de ese keko... y ahora perdonarme, que me he emocionado con el recuerdo.

Joder, te has emocionado tú y yo, que literalmente tengo los ojos humedecidos de lo bonito y entrañable del relato. Vivan esos padres.

Bueno, y el espeleólogo muy chulo, claro. A mí tampoco es que me motivara mucho, pero mi hermano mayor tenía uno (debía ser un caja roja) con el colt 45 y una gorra de tropa de montaña y cuando los heredé, era el héroe de las aventuras.